Pues eso, ya debería haber escrito hace tiempo, pero la verdad es que no tengo horas en el día para buscarle un huequecito al blog,solo lo encuentro para leeros a vosotr@s, pero para el mío no hay tiempo.
El caso es que el día 18 tomé la decisión de pasar a Gonzalo de la cuna a la cama, y así fue, le puse sus sabanitas del bob esponja (pese a que no me gusta mucho), pero la verdad es que son muy calentitas, pusimos la barandilla, la cámara enfocando para él, su mickey al lado, y le dijimos que esa noche iba a dormir ahí, aunque creo que él no comprendía mucho, pero insistimos en que estuviera presente para familiarizarse con ella, y así fue.
Pasó muy buena noche, lo cierto es que Gonzalo no ha tenido mucho apego por su cuna, solo la utilizaba para dormir por la noche, y enseguida lo sacábamos de allí en cuanto se despertaba, y no se porqué pensé que me sería muy díficil, tenía un poquito de miedo de que la cosa no fuera bien, y no quería retroceder en mi decisión.
Así que mi pequeño es un campeón, sigue durmiendo en su cama, sin ninguna queja, ahora eso sí, se mueve por toda la cama, de arriba a abajo, y de derecha a izquierda, imposible arroparlo, y la almohada le encanta, ah!!! y se levanta él solito, se me está haciendo mayor.
Bueno, ya nos veremos en otra entrada, ok?? Saluditos.
